Alameda de la Sagra

Diferentes culturas desde la Prehistoria han poblado las tierras de esta localidad, testigo de ellos son los numerosos yacimientos arqueológicos que se encuentran repartidos por su término municipal. Romanos, visigodos y árabes han transitado por este municipio cuyo casco urbano comienza sus inicios en el siglo XIV con la llegada de trabajadores a las canteras de yeso que salpican sus tierras, aunque será en el siglo XVI cuando sus viviendas de arquitectura tradicional castellana y su iglesia parroquial empiecen a configurar las calles y plazas de la villa. Pasear por sus calles es disfrutar del sabor de antaño y descubrir rincones que rememoran al visitante tiempos pasados.

Tierras llanas abarcan su territorio aunque con algunas ondulaciones como la existente en la ubicación de su casco urbano, por su término municipal discurre el río Tajo que le aporta riqueza hídrica y una vegetación de ribera. Sin embargo, las tierras de Alameda son un terreno yesoso, de ahí que abunden las canteras de yeso, pero que dificulta la existencia de vegetación existiendo en su territorio algunas pequeñas dehesas que contrastan con la aridez del resto de la zona. Diferentes caminos recorren este municipio que permiten al visitante disfrutar de agradables y tranquilos paseos por un paisaje distinto al del resto de la provincia, disfrutar de sus yesares puede convertirse en una actividad diferente y poco conocida para los amantes de paisajes distintos.