Almonacid de Toledo

Castillo

Iglesia de San Antonio Abad
Información de Almoacid de Toledo:
Teléfono: 925 314 001
Web: http://www.almonaciddetoledo.es/secciones/Turismo
Info:
Senderos
El Encanado
Email: ayuntamiento@almonaciddetoledo.es
Localidad que desde época visigoda tuvo poblamiento según los restos arqueológicos encontrados en el Cementerio Viejo pero será a partir del siglo IX cuando empieza a tomar entidad con la construcción de su castillo por parte de los árabes, más tarde los cristianos serían los dueños de esta fortaleza consolidando el asentamiento de esta población, que adquiriría relevancia a partir del siglo XVI con la construcción de su iglesia parroquial. Durante la guerra de la Independencia en el siglo XIX tendría relevancia este municipio al celebrarse en su territorio una de las batallas entre las tropas napoleónicas con el ejército español.
Terreno prácticamente llano con algunos cerros testigo que salpican la llanura toledana, uno de ellos coronado por su castillo. Campos de cultivo predominan en sus tierras siendo el olivo la principal plantación, de ahí que la calidad de su aceite este incluida en la D.O. Montes de Toledo. Caminos y senderos cruzan su término lo que permite al visitante disfrutar de sus extensos campos de cultivo y sus principales monumentos insertos en el itinerario de estas rutas.
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¿Qué ver?
Edificio del siglo XVI de estilo neoclásico, de planta de cruz latina, de una sola nave dividida en cuatro tramos, divididos por pilastras de capitel jónico y cubierta de bóveda de medio cañón limetos. Había cuadros de Alonso del Arco en el basamento del retablo mayor que representan a Santo Tomás de Aquino, S. Pedro, S. Pablo y S. Francisco de Asís.
Desde cualquier punto que nos acerquemos a Almonacid de Toledo, la silueta valiente, gallarda e inalcanzable de su castillo, situado sobre un monte que puede verse desde decenas de kilómetros, nos atrae, pidiendo que emprendamos el esfuerzo de la subida, y nos demos el gusto de la visita. Son escasos los datos que nos han quedado de la historia de ésta fortaleza. La primera referencia documental a éste castillo es de origen musulmán, y data del año 848. En el siglo XI pasó a manos del rey Alfonso VI como parte de la dote de su esposa Zaida, hija del rey moro. Posteriormente Alfonso VI lo donó a la catedral de Toledo, siendo reformado en el siglo XIV por el arzobispo Don Pedro Tenorio. En tiempos de Juan I de Castilla, sirvió de prisión, durante 8 años, al infante D. Alfonso. Modernamente vivió un hecho de armas en 1809, durante la guerra de la Independencia. En sus cercanías se produjo una gran batalla entre las tropas del general español Venegas, y las francesas de Sebastián, Desoyen y el propio José Bonaparte. Los galos tomaron el castillo, destruyéndolo en parte a su retirada. Se conserva el castillo perfectamente cercado de su primitiva defensa. Rodeado completamente por un foso, estrecho y hoy ya poco profundo, pero apreciable en todo su perímetro. Consta la fortaleza de una muralla exterior, un recinto interior, y un torreón central. Está construido todo él con mampostería de sillarejo y adobe, ofreciendo sillar bien labrado en algunas esquinas de la muralla y de la torre central, de donde prácticamente en su totalidad han sido extraídas las piedras con destino a usos diversos en el pueblo. El interior de los muros del recinto interno es de adobe grueso, y las bóvedas de las torres, de ladrillo. En su recinto interior encontramos los huecos de tres aljibes, uno de planta circular, pequeña, y otros dos alargados y profundos, con bóvedas y tallados en la roca viva. Es de acceso libre y éste se puede hacer a pie o mediante vehículo por una pista de tierra.
Edificio mudéjar, restos de la iglesia del antiguo cementerio y posiblemente primitiva Iglesia parroquial pues es de excesiva importancia para ser una iglesia de cementerio. Esta hipótesis va avalada por el hecho de estar emplazada en la parte más antigua del pueblo. Era de cruz latina que, o no tuvo nunca o perdió los brazos. Posiblemente lo primero. Sin embargo, quedan los arcos torales en pie y formándose un sitio para una habitación en el lado sur del crucero, la nave debió ser apilastrada y, aunque se conserva todo el perímetro de los muros, están destruidos hasta media altura. En el muro meridional y a la altura del cabecero, arco de medio punto, los accesos posiblemente eran dos arcos rebajados que hay en el muro norte y sur. Lo más relevante de este templo son los fragmentos de piedras visigóticas que se encuentran en él.
Esta fue construida en el siglo XVII. Es un templo muy grande de tres naves con capilla, dos sacristías y camarín de la Virgen. Con la casa del santero y la casa de comunidad forma un patio de estilo castellano cerrado por un muro y un portón. El ambiente del siglo XVII que ofrece el conjunto se ha conservado hasta hoy con singular pureza. Es de planta de cruz latina de tres naves separadas por cinco arcos de medio punto sobre pilares. Entre los arcos de la nave central, pilastras que sujetan los arcos fajones, que está cubierta por bóveda de cañón con limetos y dividida en cinco tramos. Se trata de un conjunto formado por la ermita, la casa del santero, y otras dependencias, ocupadas por una comunidad de religiosos. En 1809, durante la batalla que se libró en Almonacid en la guerra de la Independencia, fue ocupada por las tropas francesas que la utilizaron como prisión y hospital de sangre. Concluida la batalla fue liberada por los guerrilleros mandados por Mir (de Mora), Jiménez (de Consuegra) y su lugarteniente Curro (de Almonacid). Durante la guerra Civil se dañaron las pinturas, se quemo el retablo y se rompió la talla de alabastro siendo restaurada en 1979. La reconstrucción hecha en el siglo XIX y otros arreglos no han podido tener en buen estado el conjunto. Ante los robos y expolios entre los años 1960-1978 el párroco se vio obligado a llevar la imagen a la iglesia del pueblo y se cerró la ermita, hasta que el 1 de octubre de 1988 se reabrió y volvió la Virgen con la llegada de la Comunidad de Cruzados de Cristo Rey. En ella se encuentran, realizadas por Alonso del Arco en 1689, pinturas murales que ocupan 27 m2 en el presbiterio y 26 m2, repartidos en varias escenas de la vida de la Virgen, en su camarín. Pintadas al óleo sobre los muros con estilo barroco, han sido restauradas recientemente por tres restauradores titulados.
Edificio del siglo XVII de estilo barroco, de planta cuadrada de dos alturas, que tras zaguán de entrada se organiza alrededor de un patio cuadrangular. Uno de sus centros tiene un pórtico sujeto por dos columnas de piedra que sujetan el forjado del segundo piso que está formado por una galería abierta de madera. Las otras alas están cerradas por diversos huecos irregulares de ladrillo con dintel de ladrillo en forma de palmeta. Los interiores están reforzados y aún quedaba una capilla que ha sido desmantelada. Bajo un tejadillo se abre, en la parte inferior de uno de los muros la entrada a la cueva. Exteriormente tiene una fachada con la portada centrada dintelada de jambas y dintel de piedra y encima un escudo. A cada lado un hueco de ventana de ladrillo con dintel en forma de palmeta. Fábrica de mampostería y ladrillo con sillar en esquina, en la parte del muro. En los encuentros de las cumbreras, pináculos de hierro.