Borox


Ayuntamiento

Iglesia Nuestra Señora de la Asunción

Sus inicios se remontan a la época árabe cuando se crea una venta que poco a poco iría creciendo hasta llegar a poseer un castillo como defensa de esta villa. Una vez conquistada por los cristianos gran parte de su patrimonio musulmán fue desapareciendo aunque hoy en día podemos observar restos de ese pasado histórico en el emblemático edificio del ayuntamiento, levantado sobre unos arcos pertenecientes a construcciones de época islámica. En los siglos XVI y XVII se completaría su patrimonio histórico con la construcción de su iglesia parroquial y su ermita dedicada a la Virgen de la Salud. El pueblo tiene un trazado irregular, con casas de tipo historicista y reminiscencias de estilo isabelino que, generalmente, poseen dos alturas, con huecos regularmente dispuestos y paramentos con diversos motivos ornamentales (recercados, impostas, cornisas, etcétera...). Pasear por sus calles tanto de día como de noche, bajo la luz de los faroles, permite al visitante evocar tiempos de arrieros y posadas, de imágenes y mercaderes, a la vez de admirar los antañones caserones que custodian la monumental iglesia.

Borox es un lugar elegido por cineastas para sus rodajes, y es, además, un pueblo que ofrece entornos paisajísticos de gran belleza, como el paraje de "Valdelavar”. Parte de su término está formado por los yesares del valle del Tajo, que engloban las áreas de estepas yesosas mejor conservadas y más extensas de este valle. Esta sección de su territorio tiene un gran valor medioambiental por constituir unas de las escasas zonas húmedas de la comarca y por crear un ecosistema único y representativo, dada la riqueza natural que albergan tanto el paraje de Valdelavar como el Pilarejo. Diferentes caminos y senderos marcan una serie de rutas para descubrir lo pintoresco de estos paisajes naturales, disfrutar de la naturaleza y practicar senderismo o agradables paseos en bicicleta.

Información Turística

Descubre más

¿Qué ver?

Iglesia parroquial de Ntra. Sra. de la Asunción

La iglesia de Nuestra Señora de la Asunción está realizada en aparejo toledano mediante cajas de mampostería con una altura superior a los 0,55 metros entre machones de ladrillo y separadas por doble verdugada de ladrillo, alternando entre machón mayor y menor. Destacando su torre campanario coronada con chapitel de pizarra. Toda la base de la iglesia incluida la torre está realizada en sillería. Entre finales del siglo XVI y principios del siglo XVII se construyeron tres capillas renacentistas. La capilla de los Ayala es la más interesante, construida por Nicolás de Vergara el Mozo en 1579 y ejecutada por Cuadrado. Aunque se ignora la fecha de finalización sabemos que en 1625 llevaba ya varios años terminada. Destaca en esta capilla un retablo con el martirio de Santa Catalina de Alejandro de Loarte. Entre 1575 y 1629 se construyeron las capillas de los Rincón, atribuida también a Vergara, y la de don Alonso de Vargas, secretario de Estado en Milán y pariente del secretario de Felipe II Diego de Vargas, muy posiblemente debida a Juan Bautista Monegro. Según las Relaciones de Felipe II, sabemos que los enterramientos eran comunes en la iglesia a todos los vecinos por sus terrenos por órdenes que tenía la iglesia. En 1653 se restauró todo el interior del templo bajo la dirección de Felipe Lázaro Goiti. Destaca un cuadro al óleo de la Asunción de Nuestra Señora pintado por Jacinto Gómez y Pastor, discípulo de Bayeu y pintor de cámara de Carlos IV.


Ermita de Ntra. Sra. de la Salud

Presenta planta de cruz latina lobulada, cubriéndose la nave mayor, con bóveda de cañón con lunetos, de tres tramos, separados por arcos fajones que cargan sobre pilastras adosadas a los muros, rematadas por capiteles, sobre los que corre un entablamento, base del arranque de la bóveda. Los brazos menores de la cruz de planta, tanto los laterales, como la capilla Mayor, están rematados por muros semicilíndricos, cubiertos por bóvedas semiesféricas de concha, a modo de grandes nichos. El crucero de planta cuadrada, se cubre por cúpula esférica, con óculo superior de planta octógonal, y lucernario, rematado exteriormente, con una flecha. La cúpula, carga sobre las claves de los cuatro arcos triunfales, que se abren a los cuatro brazos. Estos arcos, destacan fuertemente, tanto en dimensiones como en ornamentación, sobre los arcos fajones de la nave central. El paso de planta cuadrada de crucero, a la circular de la bóveda, no se hace ni con pechinas ni con trompas, sino directamente, por medio de un plano horizontal de donde arranca la cúpula, y en que las enjutas triangulares de las cuatro esquinas, quedan sustentadas por cuatro angelotes barrocos, que como pequeños atlantes hacen las veces de ménsulas en dirección diagonal. Estos angelotes que a su vez cargan sobre sendas columnas de sección cilíndrica semiexentas, colocadas en los vértices del crucero, fueron pintarrajeados en una restauración realizada hace no mucho tiempo, con unos horribles colores, que el tiempo no ha logrado matizar. Es quizás, la única nota discordante del conjunto. Tanto la bóveda de cañón como la cúpula, están compartimentadas por nervaturas resaltadas. Las bóvedas de las capillas laterales son por el contrario, totalmente lisas. Exteriormente, los muros son de fábrica de ladrillo visto, con machones y verdugadas horizontales, rellenándose los entrepaños con mampostería de piedra yesosa del país, todo muy toledano. La fachada principal es muy sencilla, y contrasta con el barroquismo del interior. Solamente se destaca la puerta de acceso, guarnecida con sillares de caliza, fuertemente almohadillados, formando un dentado. El dintel, está adovelado, a modo de arco plano, realzando los arranques y la clave está labrada con amplias estrías verticales. Sobre el dintel, la fábrica de ladrillo forma un arco circular de descarga. Encima de la puerta, hay una ventana rectangular, guarnecida en forma análoga, pero de menor entidad.


Ayuntamiento

El ayuntamiento es otro edificio muy interesante que cierra por el oeste la plaza principal de la villa, plaza que ha cambiado de nombre numerosas veces en los últimos cien años; actualmente se llama de la Constitución. Tiene el edificio dos plantas. La planta baja, está constituida por tres arcos de paso. El central es un arco circular de 6 metros de luz, con sus arranques, 1 metro de altura desde el suelo, para el paso de carruajes; los laterales para peatones, más estrechos, y rematados también por arcos de medio punto. La planta alta, está formada por un balcón corrido, o corredor, entramado de madera, tanto en postes, como carreras, zapatas y alero. Este balcón, se utilizó, desde su construcción, como palco presidencial de los festejos taurinos, y de toda clase, que se celebraban en aquella plaza, festejos en los que tantas veces actuó el que en sus primeros tiempos era llamado “El Paleto de Borox” y a quien hoy todos los aficionados recuerdan como “El Maestro de Borox”. En el mismo edificio se hallaban el pósito y la cárcel tal y como viene reflejado en el plano topográfico del siglo XIX del Instituto Geográfico Nacional.


Paraje de Valdelavar

Zona de gran valor medioambiental por constituir unas de las escasas zonas húmedas de la comarca y por crear un ecosistema único y representativo dada la riqueza natural. Alberga suelos yesíferos en sus laderas circundantes donde cohabitan zonas húmedas de gran interés medioambiental. Posee una semicueva horadada por las infiltraciones continuas de agua en la yesífera, y tanto en verano como en invierno es un precioso espectáculo el ver como rezuman las infiltraciones de agua provenientes de la superficie y que provocan en las paredes de esta curiosa formación, el crecimiento de una cortina de helechos y plantas acuáticas endémicas difícilmente imaginables en el territorio de La Sagra y en los meses de invierno hermosos témpanos de hielo.