Miguel Esteban

Data del siglo XVII y está reconstruida sobre planta de cruz latina y naves laterales de posterior añadido. El material utilizado es el barro, el yeso y piedras irregulares. Tan sólo la base de la torre, esquinas y fachada frontal están construidas con piedra de sillería. El estilo de la iglesia responde a conocidos recursos de la arquitectura herreriana, arcos de medio punto, frontones, cúpula de imitación renacentista, bóveda de cañón y cornisa y ornamentos de escaso valor artístico hechos en escayola y barro. Cabe resaltar el arco de piedra que nos encontramos en el pórtico de la entrada, en el que podemos ver una clave decorada con una hoja de acanto, acompañada de una fecha, que posiblemente nos oriente de la época en la que pudo ser reformada o reconstruida, tras sufrir numerosos incendios. Cabe resaltar también, el rescatado arco de piedra, hallado al norte, junto al coro y en la nave central del templo, que es mentado en documentos y conocido como puerta del Cementerio. Es un arco de fabricación antiquísima, posiblemente sea uno de los elementos arquitectónicos más antiguos de la iglesia. Todo el interior está enlucido en blanco con cenefas, líneas de decoración y zócalo pintado en gris. Al exterior muros de sillarejo y sillares en esquinas y parte del zócalo. La torre situada a los pies dividida en tres cuerpos, el primero de sillares de piedra con pequeños huecos en uno de sus lados, el segundo del mismo material con huecos de arco de medio punto en cada una de las caras y el tercero que alberga el campanario de ladrillo con un hueco de medio punto enmarcado a eje con el hueco inferior y cubierta de teja a cuatro aguas. El acceso situado en el lado sur con arco de medio punto con clave con inscripción "1695" y "1633" sobre jambas con capitel con decoración, alberga otro arco de medio punto más pequeño con puerta de madera y sobre este último escudo con la cruz de Calatrava.

Situada en una atalaya que constituye uno de los enclaves con más encanto de Miguel Esteban, desde la cual se pueden contemplar unas espectaculares vistas del paraje y las lagunas que forman la reserva ornitológica Los Charcones. La ermita es de planta rectangular cubierta a dos aguas al interior y al exterior. En la cabecera se encuentran tres arcos de medio punto sobre pilastras, las dimensiones del central son mayores que los laterales, todo en ladrillo sobre muro enlucido y pintado en blanco. El altar se realiza en fábrica de ladrillo cara vista. El suelo de la ermita es de gres rústico en todo su interior. A lo alto de los muros se abren ósculos que recorren los cuatro lados del rectángulo. En el exterior un pórtico formado por arcos de medio punto recorre la ermita a los pies y en los laterales. El muro de la fachada a los pies se remata con formas cóncavas y en el centro un campanil formado por un arco de medio punto. En cada esquina de la ermita pináculos con bola. Todo el exterior, enfoscado y pintado en un color arena. Se construyeron también cuatro molinos a lo largo del cerro para ambientar y recrear una estampa cervantina.

Es uno de los espacios culturales más importantes del municipio. Cuenta con una superficie cercana a los 300 metros cuadrados y mantiene la estructura y distribución de las típicas casas manchegas, lo que le confiere un encanto especial. Para la creación de este museo Etnográfico, el ayuntamiento adquirió la antigua casa de labranza del "Tío Félix", situada en la calle Valencia esquina con Calvo Sotelo. La casa fue rehabilitada como un espacio de difusión de la historia pasada, la cultura y la tradición migueleta. A él se accede a través de un gran portón de madera recia. En las diferentes estancias se han dejado a la vista las vigas de madera en los techos y pasillos. El museo se distribuye en torno a un gran patio central, elemento muy común de las casonas manchegas, al que se asoman los balcones de madera de la planta superior y las columnas de piedra de la planta baja. Además de albergar exposiciones temporales, encuentros literarios y conciertos, la Casa del Tío Félix es escenario habitual de diferentes representaciones teatrales en las que el público se integra como un elemento más y puede disfrutar de un teatro mucho más cercano e íntimo.

Declarada refugio de caza, la reserva ornitológica Los Charcones está situada a dos kilómetros del casco urbano de Miguel Esteban, en la carretera dirección a El Toboso. Es un espacio natural constituido por varias lagunas de origen endorreico que ocupan 60 hectáreas. Su principal aporte hídrico son las aguas residuales del municipio, depuradas por un sistema denominado ‘lagunaje’. Sin duda, una joya de la naturaleza de indiscutible importancia paisajística, medioambiental y ecológica, reconocida internacionalmente. La reserva ornitológica Los Charcones constituye una auténtica maravilla ecológica, un oasis en medio de la llanura, un enclave de enorme valor medioambiental que permite descubrir y admirar la belleza de la naturaleza. Sus aguas no sulfurosas con cloruros, grasas y sustancias disueltas, las hace especialmente atractivas para aves acuáticas y vegetación palustre y halófila. Son lugar de paso migratorio de aves y un hábitat importante para ellas. Además de aves, en la reserva podemos encontrar una gran variedad de animales: insectos como los caballitos del diablo y las libélulas, culebras de agua, ranas, sapos, liebres, perdices, zorros y comadrejas. Sin duda, una propuesta atractiva no sólo para expertos ornitólogos, sino también para disfrutar en familia y transmitir a los más pequeños la importancia de conservar el medio ambiente.

Enclavada junto a la reserva ornitológica Los Charcones, al inicio de la ruta, se encuentra el aula de la naturaleza, una especie de cabaña de madera que permite una primera toma de contacto con lo que después podremos ver recorriendo las lagunas. El aula de la naturaleza incluye una exposición sobre la importancia de Los Charcones, su valor ecológico y su riqueza de flora y fauna. A través de diferentes paneles, podemos conocer cómo se formaron estas lagunas y qué especies de plantas y animales predominan en este paraje así como sus características. Estos conocimientos, nos ayudarán a identificar los ejemplares que encontremos en las lagunas. En este espacio, también se desarrollan diferentes talleres medioambientales como elaboración de sales aromáticas o de pins naturales, decoración de piñas naturales y decoración de aves. La cabaña también cuenta con una pequeña sala comedor para realizar reuniones, charlas o encuentros, además de aseos.